jueves, 6 de septiembre de 2012

UN AÑO DESPUES


UNA FAMILIA QUIMILENSE AUN ESPERA QUE LA JUSTICIA DISPONGA LA REALIZACION LOS PROCEDIMIENTOS PARA PODER BRINDARLE EL ADECUADO DESCANSO A LOS RESTOS DE EDUARDO CANCINO.





EXTRACTOS DE NOTAS PUBLICADAS EN ESTE MEDIO:

lunes, 8 de agosto de 2011
DESESPERADA BUSQUEDA DE UN QUIMILENSE QUE FALTA DE SU HOGAR DESDE EL SABADO
Eduardo Cancino tiene 72 años, padece de arterioesclerosis, es vecino
del Bo Colón y falta de su hogar desde el pasado sábado 6, a las 8,30
hs. De acuerdo a los datos difundidos por familiares directos y
autoridades…


martes, 6 de septiembre de 2011
El peor final
HALLAN LOS RESTOS DE EDUARDO CANCINO EN
LOS FONDOS DE UNA PROPIEDAD DEL Bo COOPERATIVAS

Había sido visto en las inmediaciones por última vez el día de su
desaparición, hace exactamente un mes. Su yerno asegura haber buscado
infructuosamente a las pocas horas, palmo a palmo, en ese predio que
tiene una cerca perimetral de alambre tejido.

En horas de la siesta del martes 6, unos chicos que se disponían a
cazar pájaros en los fondos de una propiedad ubicada en la zona sur de
la ciudad encontraron los restos óseos de una persona que de acuerdo
al reconocimiento de las ropas efectuado por un familiar directo
serían las que vestia Eduardo Cancino el día que salió de su casa en
las primeras horas de la mañana, hace exactamente un mes.
El hombre, de 72 años, vecino del Bo Colón donde vivía con su esposa
Ada Carabajal y su hija Grettel, sufría de una avanzada
arterioesclerosis que se manifestaba en la pérdida del sentido de la
orientación y otras secuelas.
El pasado 6 de agosto habría salido de su casa aproximadamente a las
7,30 hs y fué visto por última vez en una callecita que marca el fin
del Bo Las Cooperativas, ubicado en la zona sur, a pocos centenares de
metros de la Ruta 89, que conduce a la Ciudad Capital.
Horas más tarde dió comienzo a la búsqueda por parte de sus familiares
directos y es allí, a las pocas horas, que el yerno Roberto Kuriger
pidió permiso para ingresar al predio ubicado al frente de donde fuera
visto por última vez.
Este es propiedad del Ingeniero Oscar Murad quién vive allí con su
familia y está rodeado de una cerca perimetral de alambre tejido con
postes de hormigón lo que la hace absolutamente infranqueable, salvo
el ingreso por los portones ubicados al frente.
En este dia del hallazgo de los restos Kuriger asegura a pie juntillas
que el realizó una búsqueda exhaustiva por todo el predio cubierto de
malezas de poca altura, comunmente llamados fachinales, la que dió
resultados absolutamente negativos.
¨Yo no me explico como pueden aparecer ahora, si yo busqué palmo a
palmo, en zigzag y no había nada¨, expresa el familiar en una mezcla
de desazón y no poco desconcierto.
De hecho, de acuerdo al reconocimiento de los restos efectuado por su
hija Grettel, totalmente degradados e incompletos, la ropa concuerda
con la que vestía Cancino al salir de su casa por última vez.
La casa familiar de Murad está ubicada a unos 250 o 300 metros del
lugar del hallazgo y resulta casi insólito que nunca nadie haya
sentido ningún signo de la degradación del cuerpo, teniendo en cuenta
la cercanía de un barrio poblado e inclusive de gente que a muy pocos
metros de la cerca perimetral realizó en este tiempo tareas de
desmonte con motosierras.
Por estas horas se esperaba la llegada de peritos forenses de la
Ciudad Capital…



Ha pasado un año y un mes desde la desaparición de Eduardo Cancino y
sus familiares deben lidiar aún con el vacío que representa en sus
vidas. Tantas dudas, tantos interrogantes, pero los tiempos judiciales
son otros.

 Un aporte de Adriana Cancino:


Tu amor y bondad
vivirán en nosotros por siempre,
te fuiste de la tierra
pero no de nuestros corazones.


Porque fuiste un excelente esposo,
un padre ejemplar,
un abuelo cariñoso,
y un ser humano sin igual,
te queremos y extrañamos…