JULIAN RAFAEL DIB

UN INVESTIGADOR CON RAICES QUIMILENSES SE PROYECTA HACIA EL MUNDO

Tucumano, 33 años años, egresado de la Universidad Nacional de Tucumán e investigador de la Planta Piloto de Procesos Industriales Microbiológicos (Proimi Conicet) acaba de recibir la beca Alexander Von Humboldt, una de las más prestigiosas del mundo.

Julián Rafael Dib, doctor en Ciencias Biológicas, especialista en Microbiología Molecular, hijo de Roberto Dib, médico quimilense radicado en Tucumán y de mamá bioquímica, combina las dos ramas enseñando en la cátedra de Parasitología y estudiando microorganismos extremos en el Proimi Conicet.

Además, gracias a sus generosos 1,86 mts despunta el vicio del básquet deporte que supo practicar en la primera división local y del cual guarda hermosos recuerdos recogidos durante su estadía en Baltimore, EE UU, cuando era beneficiario de la beca Fullbrigth.

Antecedentes estos que justifican largamente la nota publicada por el prestigioso periódico La Gaceta, del Jardin de la República y al cual tuvo acceso este medio gracias a la gentileza de su orgullosa tia, Estela Dib de Gola.

En su transcurso Dib reconoce orgulloso que la beca Humboldt fué recibida por más de 40 premios Nobel. Esta no apoya proyectos sio personas, por eso durante dos años vivirá en Alemania. Primero estudiando alemán durante cuatro meses en Dusseldorf, en el Instituto Goethe.

Luego investigará los mecanismos genéticos de ciertas bacterias para resistir situaciones adversas y extremas en la Universidad de Munster. Será su cuarta visita al pais germano y la más larga.

Refiere que se lleva una colección de bacterias recogidas en las Lagunas de Altura del Norte en Salta y Catamarca, con el equipo de la Dra Maria Eugenia Frias, del Proimi., microorganismos que viven en los límites de la vida, crecen en agua a punto de ebullición, con 25 % de sal y muy poco oxígeno.

¨Algunas las descubrimos hace tan poco que no tienen denominación científica. Yo estudio sus características genéticas y sus capacidades para crecer en esos ambientes hostiles¨, declara el investigador.

A Julián lo espera la primavera europea y un laboratorio del primer mundo, también algo de básquet

Después promete regresar a la Argentina. Ergo.