POSTALES QUIMILENSES
De un tiempo a esta parte el Bo Juan
XXIII, uno de los más populosos de la ciudad, ha ido adquiriendo una
nueva fisonomía, más adecuada a los tiempos que corren. Ello es la
resultante de la pavimentación de calles que hasta no hace mucho
eran prácticamente intransitables en el tiempo que fuera. En épocas
de la canícula por el polvo suelto y en épocas de lluvia por el
consiguiente lodazal en que se convertían por obra y gracia del
tránsito irrestricto de vehículos cuyos conductores no respetan
pelos ni marca. Por suerte las autoridades están implementando un
plan sin prisa y sin pausa que contempla la cobertura de casi todas
las arterias del conglomerado y así poco a poco se van cubriendo de
esta pátina de progreso que amerita el aplauso unánime de quienes
dia a dia trabajan y sueñan por un futuro pródigo en realizaciones.
Chan chan.
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